Edmundo Valadés habla en una entrevista de su amistad con Juan Rulfo. Su amistad duró años y años. Sí, sentía curiosidad por saber por qué Rulfo no publicaba nada. Después de
El llano en llamas y
Pedro Páramo, parece que decidió dejar de escribir.
-¿No sentía curiosidad por preguntárselo? -le inquirió el entrevistador.
-Sí, desde luego -respondió Valadés-. Pero sentía que nuestra amistad reposaba en ese sobreentendido. Si yo le hubiera preguntado por qué no escribía nada, si le hubiera pedido un cuento para la revista, nuestra amistad se hubiera resentido , hubiera acabado.