Nos quedamos mirando absortos aquella maravilla. Estábamos alucinados. De pronto, uno de los espectadores comenzó a ser absorbido. Se desvaneció en el interior. Ocurrió tan rápido que sólo cuando otra mirón comenzó a desaparecer nos dimos cuenta de lo que estaba ocurriendo. Tuvimos que salir huyendo. Aquel agujero negro era extremadamente peligroso.